CON LOS 4 SENTIDOS
Le encantaba tocar el piano. Adoraba la música. Era ciega. No sabía idiomas. Sin embargo, un día se emocionó al escuchar una canción acapela en inglés. Corría el año 1972. Alicia no era como todas las niñas de su edad. Ella no jugaba con muñecas, ni saltaba a la comba en el jardín de su casa, ni quedaba con las amigas para montar en los columpios del parque de su barrio. Su infancia resultó ser un tanto más amarga. Cada mañana preparaba su mochila para acudir al colegio, no sin antes bañar y dar de desayunar a su abuela Dorothy… quien ya a duras penas podía reconocerla salvo en aquellos escasos instantes de lucidez. Ambas vivían juntas en la casa rural de Northville City, desde el brutal accidente que costó la vida a sus padres en el verano de 1969 a la vuelta de unas vacaciones en familia. Y en todo momento se entregó a ella, en cuerpo y alma, para evitar que fuera a un hogar de acogida tras la tragedia. Le proporcionó un modesto hogar y una familia, mucho más que cualqui...