#microcuento
Mirar el reloj de arena, convertido en vapor de agua por la humedad de mis lágrimas. Sólo el olor a café recién hecho me recuerda con exactitud el día, la hora, el instante, el lugar, con quién y el por qué. Solamente nos miramos, en silencio. Buscando respuesta a tal desorientación, sonreímos sin razón. Un ramo de rosas como trinchera en plena batalla del querer. El poder rompe fronteras. El deseo derriba barreras. La razón sale sigilosamente por la puerta. La lógica se queda observando. El corazón continúa hablando. Ya no hay marcha atrás. El tiempo ya es historia, cuando unidos somos tan solo una persona...
#microcuento #saraoss
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