DONDE HABITE LA ESPERANZA
¿Y qué? Si solo se vive una vez… dos como mucho, si nos
portamos bien. Los barcos se hicieron para surcar los mares, pero también los
cielos, y así curar todos nuestros males. Plantarle cara al mar, eliminando las
barreras para navegar donde nacen las olas y el sol se oculta, dejando paso a la
sombra.
Dejé atrás las cuerdas que me ataban al recuerdo, a
tantos pensamientos inútiles que caducaron, pero no tuve el valor de tirar para
salir de un pasado que me sujetaba y no me dejaba avanzar… aquella hoguera fue
mi liberación, quemé tantas y tantas cartas que hablaban de todo, pero que no
decían nada. Olvidar. Tan difícil como eso. Decisiones que duelen, quedarse
anclada en la orilla de un pasado cuyo eco resonaba en medio del silencio, o
romper barreras con el hacha de guerra, que dejaré enterrada antes de partir,
porque como arma de defensa llevo solo mi valor y mis ganas de enfrentar lo que
suceda.
¿Y qué? Si nada me puede detener, al menos nada físico,
sólo mi mente me puede convencer. Pero lograré dominarla, lo haré. Tengo miedo
a lo desconocido, pero más miedo tengo de quedarme hundida en las ruinas de un
pasado que intento quemar, pero que les cuesta arder. Espero… pero la llama no
viene a liberarme…el fuego es sólo mi potencial para escapar…los barcos no
pasan, ¿y qué? Tengo que alcanzar la meta. Iré nadando mientras, sin volver la
vista atrás pero mirando, veo como las llamas del pasado queman recuerdos que
jamás volverán a habitar en mi. Mi mente se quedó pequeña para acoger todas las
historias, me quedo solo con aquello que sane mi memoria…recordando lo que un
día fui, gracias a lo cual estoy hoy aquí, en algún rincón del futuro a salvo,
que es mi isla del naufragio…cuando la hoguera ya se ha apagado. Ahora me voy,
que llego tarde a dibujar un destino nuevo, cuando mis frenos se bloquearon,
ahora es imposible pararme…mi mente es libre, ya no hay recuerdos que me aten…
¿Y qué? Si todo es más simple que esto… ¿por qué nos
complicamos tanto?, que la hoguera son las buenas experiencias que matan lo
negativo, que el mar es el manto que se llevó mis lágrimas ayudándome a caer en
el olvido…y el barco que espero es la gente que me lleve lejos…allá donde el
horizonte se pierde y nacen y crecen los sueños…
Comentarios
Publicar un comentario